Una pregunta frecuente es:
¿Por qué los perros son tan propensos a las otitis?
He aquí la explicación: La anatomía del conducto auditivo de los perros favorece la aparicion de infecciones; este conducto es más ancho en la zona externa y reduce su tamaño hacia el interior a medida que nos acercamos al tímpano (a modo de cono); del mismo modo que la presencia de un canal vertical y posteriormente de un canal horizontal dificulta la limpieza.
A la anatomia, sumemos las condiciones que prevalecen en el oido:
- Es un lugar oscuro,
- Es cálido
- Húmedo
- Hay poca o nula ventilación.
- En la mayoría de los casos, existe una excesiva producción de secreciones propias de los oidos (cerumen), a consecuencia de alguna leve irritación o inflamacion preexistente.
Y Como factor Determinante en la incidencia de aparición de otitis tenemos LA RAZA, desde luego que la raza del animal es un factor a considerar en la incidencia de las infecciones de oidos, ya que algunas de ellas son mucho mas propensas a suifrirlas que otras, por ello las medidas de higiene deben ser mas frecuentes que en aquellas cuya morfología no es un factor determinante.
Las causas podemos dividirlas en:
Causas Primarias:
Las causas primarias de otitis son:
- Las alergias,
- los parásitos (ácaros),
- los cuerpos extraños (espigas),
- exceso de pelo en el canal (muy frecuente en razas como los Caniche o los Schnauzer),
- malformaciones anatómicas o
- trastornos hormonales.
Causas Posteriores:
Son aquellas que que perpetúan las otitis; tales como: Las bacterias, als cuales son habitantes normales de los oídos de los perros, pero sin embargo, en determinadas situaciones contribuyen a crear las condiciones ideales para su multiplicación, y es precisamente ese exceso el que produce la infección. Las bacterias más habituales son Staphilococus y Pseudomona auroginosa.
La mayoría de las causas, que originan la otitis, actúan en el oído externo (formado por el pabellón auditivo, el canal vertical y el canal horizontal).
Síntomas visibles
Los signos que nos permiten detectar el problema son:
- Insistencia en rascarse alrededor de las orejas,
- Frotarse los oídos por el suelo o contra los muebles y, por último,
- Las sacudidas frenéticas de la cabeza.
Es importante prestar atencion a estos síntomas, ya que nos permitirán atajar una infección en estado leve.
Si la inflamación es más grave e invade el oído medio aparecera la siguiente sintomatología:
- Alteración del equilibrio, como el dar vueltas en círculo,
- Torcer la cabeza hacia el lado del oído afectado,
- Pérdida del equilibrio y/o movimiento anormal de los globos oculares (nistagmus).
En algunas razas, después de tener una otitis, se produce un engrosamiento y estrechamiento del canal. (En el cocker es muy frecuente)
En algunos animales a consecuencia del traumatismo continuado se produce una acumulación de sangre en el pabellón auricular. Esto recibe el nombre de otohematoma y es debido a la rotura de pequeños vasos.
Cuando se produce un otohematoma no debe hacer nada si su tamaño no es importante. Si su tamaño es grande la realización de cirugías simples con el perro anestesiado o sedado son suficientes para solucionarlo.
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