HIGIENE ESCOLAR



El niño pasa cada vez más tiempo de su vida en la escuela. Las guarderías y Escuelas Infantiles los reciben a muy temprana edad, y deben estar preparadas para ofrecer un ambiente higiénico que asegure la salubridad de todas las instalaciones.

Pero no es sólo la instalación el objeto de lo que se ha dado en llamar “higiene escolar”. El profesorado debe tender a evitar el excesivo cansancio o fatiga que puede provocar una programación errónea, con horarios o actividades inadecuadas, mal repartidas, etc.


Igualmente atenderán solícitamente al niño enfermo y estarán alerta para descubrir los síntomas de las enfermedades infecciosas y aislar al enfermo.
Un aspecto muy importante es la labor de medicina preventiva que desarrollan los centros escolares con la realización periódica de reconocimientos médicos, que en no pocos casos, ha diagnosticado precozmente enfermedades (tuberculosis pulmonar, reúma), malformaciones o alteraciones óseas (escoliosis, pies planos), anomalías neuropsíquicas, etc.



Joaquín Tesón.

Comentarios