Hace escasamente una semana se dio inicio oficialmente a la primavera, y aunque para la mayoría es el inicio del buen tiempo y, nuestras mascotas comienzan a disfrutar de paseos mas largos y de mayor tiempo en los parques y jardines, es importante que tengamos en cuenta que uno de los enemigos mas comunes también hace su aparición en estas fechas; nos referimos a las garrapatas, uno de los vectores de transmisión de enfermedades por excelencia.
Hoy hablaremos sobre esta pequeño y nocivo animalito.
Las Garrapatas son parásitos hematófagos (se alimentan exclusivamente de sangre de vertebrados) y, lo que muy pocos saben es, que pertenecen a la Clase Arácnida (misma Clase que las arañas, escorpiones y ácaros), y de las cuales, aunque cueste creerlo, existen cerca de 900 especies diferentes, aunque la más conocida es la garrapata marrón del perro.
Esta clasificación es debido a que poseen 4 pares de patas ambulatorias articuladas, mientras que el resto de insectos solo posen 3 pares; su cuerpo es una sola estructura, y no poseen antenas.
El ciclo completo de vida de las garrapatas tiene una duración de 8 a 12 semanas; pero es importante destacar que si las condiciones de eclosión de los huevos no es la apropiada, éstos pueden permanecer latentes durante un período de hasta 3 años; y tanto las larvas como los adultos poseen una resistencia al ayuno de 8 meses (larvas) hasta 18 meses (adultas), es decir que pueden sobrevivir a 18 meses sin ingerir alimento alguno. Son precisamente estos rasgos los que le confieren una permanencia dentro del ciclo ecológico, y evitan su completa extinción.
Por norma general el apareamiento se lleva a cabo sobre el individuo huésped, aunque la hembra ovoposita en el suelo, grietas, paredes, etc.; ya que las condiciones de estos sitios garantizan la supervivencia de los huevos hasta el momento de la
eclosión. La hembra puede depositar entre 4.000 hasta 7.000 huevos en un ciclo, procurando que estén lo mas cerca posible del lugar de descanso del perro.
Las garrapatas son mucho mas peligrosas y nocivas de lo que creemos, ya que son agentes portadores de diferentes enfermedades y, no solo ataca a especies animales, también pueden afectar a los humanos. Aunque su control es bastante simple, debemos tener presente que la protección a nuestras mascotas debe ser continua, considerando los ciclos de vida de la garrapata.
El ciclo de vida de las garrapatas cuenta con 4 fases de desarrollo: huevo, larva, ninfa, y adulto. El proceso de cambio que se produce entre fase y fase se llama metamorfosis o muda. La garrapata del perro lleva a cabo estas fases utilizando a 3 hospedadores:- La larva recién “nacida” se sube a un perro y se alimenta de su sangre, luego baja y muda a ninfa en el ambiente;
- Esa ninfa sube a un 2° perro, se alimenta, baja, y muda a garrapata adulta en el medio ambiente;
- Esta garrapata (ya adulta) se sube a un 3er perro para alimentarse (por hasta 21 días) y luego bajar a poner los huevos en el ambiente (si es hembra).
Pero debemos tener claro que, no necesariamente serán 3 hospedadores diferentes, el individuo puede ser el mismo, tal es el caso que se da en aquellas casas con jardines, y donde al haber solo una mascota cada cambio se produce en el mismo individuo; por ello podemos ver en un mismo perro garrapatas en diferentes estadios de desarrollo; lo que hace necesario que se realicen tratamientos para combatirlas en las diferentes etapas, a fin de intentar romper el ciclo de vida de la garrapata. También debemos destacar que el período de actividad de la garrapata da inicio en el momento que la temperatura ambiental supera los 7 grados centígrados, y a medida que se incrementan aumenta también la actividad de las garrapatas, es por ello que se observan las mayores infestaciones en primavera y verano.
Entre las enfermedades más frecuentes transmitidas por las garrapatas tenemos:
. La piroplasmosis, o babesiosis.
Síntomas: Los animales enfermos pueden presentar anemia, fiebre, aletargamiento, deterioro del estado general, diarreas, dolor muscular, apatía, mucosas pálidas, anorexia, sangrado pro la naríz sin razón aparente, diarreas, orina con sangre, entre otros signos. En algunos casos, si no se detectan a tiempo, estos signos clínicos y la debilidad progresiva ocasionada por le enfermedad, conllevan a la muerte del animal. Los cachorros son los mas propensos a padecer esta enfermedad, y los síntomas suelen ser más agudos mientras mas joven es el animal.
Tratamiento: Actualmente y por lo que se desprende de los últimos estudios realizados, el tratamiento que mejor resultado está dando y que está eliminando la infección por babesia es el uso de azitromicina y atavaquona. En algunas ocasiones, el animal afectado podrá requerir de la aplicación de sueros por vía intravenosa, e incluso una transfusión, si la enfermedad ha sido muy agresiva.
. Ehrlichiosis (Causado por la bacteria Ehrlichia canis).
Síntomas: Fiebre muy elevada, aumento de los ganglios, dificultad respiratoria, anemia, ceguera, signos neurológicos ( dificultad en mantenerse de pie, temblores, descoordinación al andar, entre otros); y en sui fase aguda pueden haber episodios de vómitos y edemas
El tratamiento es a base de antibióticos, durante un período de entre dos y cuatro semanas. El pronóstico de curación de esta enfermedad tiene directa relación con el estado de salud y la edad del animal.
. Enfermedad de Lyme, o borreliosis
Síntomas: Esta enfermedad tiene categoría de zoonosis, o lo que es lo mismo, es contagiosa para los humanos. Pero afortunadamente la enfermedad de Lyme no se transmite directamente de tu mascota a ti, el contagio solo se produce si una garrapatas infectada te pica a ti.
La bacteria causante es la Borrelia burgdorferi, que afecta la piel y se propaga hacia las articulaciones y sistema nervioso pudiendo afectar a otros órganos en su etapa más avanzada. Entre los síntomas se observan: fiebre, anorexia, poliartritis, miopatías y adenopatías.
Tratamiento: Esta enfermedad puede combatirse a través del uso de antibióticos durante un período mínimo de 3 semanas ininterrumpidas; tras lo cual el animal se recuperara, bastante bien sin apenas consecuencias.
¿Cómo controlar y prevenir la infestación por garrapatas?
Primeramente debemos tener presente que sólo el 5% de las garrapatas se encuentran en el animal, el 95% restante se encuentra en el medio ambiente.
Es por ello que, para poder controlar de forma exitosa las infestaciones por garrapatas, se debe actuar tanto tanto sobre el perro como sobre el ambiente:
Tratamiento sobre el animal:
- Pipetas que contengan piretroides (como por ejemplo, permetrina) o fipronil. Se deben aplicar una vez al mes. Suelen perder eficacia si el perro está en contacto prolongado con el agua.
- Collares con insecticidas (hay una variedad de marcas en el mercado): la constante liberación del principio activo (deltametrina) desde el collar permite que el efecto dure 6 meses, e incluso resista al agua. La deltametrina es activa contra todos los estadios de las garrapatas (larvas, ninfas y adultos). Al estar permanentemente protegido contra las garrapatas, se reduce el riesgo de que el perro contraiga enfermedades transmitidas por las mismas.
- Tratamiento ambiental:
- Fumigación mediante el rociado con insecticidas que contengan piretroides (como por ejemplo, Cipermetrina), de patios, jardines, terrazas, galpones, cuchas. Los piretroides son drogas efectivas contra las garrapatas y muy seguras. En general los productos vienen para diluir en agua y colocar en el ambiente mediante aspersores. La fumigación debería repetirse cada 15 días, incluso en Invierno, a fin de romper con el ciclo vital de la garrapata.
- Mantener el pasto de los jardines lo más corto posible y evitar que hayan roturas y/o grietas en paredes y pisos, eliminando posibles nidos.
Evelyn Hernández.
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