El juguete es la herramienta que utiliza el niño para realizar su principal trabajo, que no es otro que jugar. A medida que el niño crece los juguetes se van adaptando a las nuevas necesidades lúdicas y de desarrollo del niño.
Algunas de las funciones más relevantes que cumple el juguete son las siguientes:
Los juguetes los podemos clasificar como de perceptividad, que son los juguetes que producen sonidos y/o movimientos; de psicomotricidad, son aquellos que desarrollan la motricidad en el niño, que pueden ser los de arrastre; los que contribuyen a la habilidad manual; los que afectan a la actividad física de todo el cuerpo; de afectividad, son aquellos juguetes en los que el niño deposita emotividad, como en el caso de los peluches u ositos; dramáticos que permiten al niño canalizar sus fantasías en forma de juego simbólico utilizando la dramatización.
Pueden ser de tres tipos: los que reproducen las acciones de los adultos, como coches, teléfonos, planchas, cocinas, etc...; los que ayudan a identificar personajes, como los disfraces; por último tenemos aquellos que estimulan la fantasía a través de muñecos, como es el caso de los títeres.
Los de creatividad permiten al niño crear entes reales o imaginarios; los intelectuales permiten la posibilidad de resolver problemas, ya sea por asociaciones especiales o lógicas, como el caso de juegos como el dominó, ajedrez, etc...
Los sociales son aquellos juguetes para uso colectivo que tienen un reglamento y contribuyen a que se desarrollen conductas sociales; como ejemplo tenemos un bingo, juegos de cartas, etc...
De ejercicio, que a su vez pueden ser: sensoriales, manipulativos, psicomotrices.
Simbólicos, son los juegos de representación y de roles.
De ensamblaje, como los juegos de construcción, de montaje de mecanos, de poleas, etc...
De reglas, como los juegos de habilidad, de azar, de estrategias, etc...
Lingüísticos,juguetes que contribuyen al desarrollo del lenguaje.
Afectivos, juguetes con los que el niño puede desarrollar su afectividad de forma plena.
Algunas de las funciones más relevantes que cumple el juguete son las siguientes:
- Incentivar la creatividad y la imaginación.
- Ser un objeto que incite al juego, ser objeto de recreo.
- Formar al niño, ayudarle a aprender.
- Fomentar la convivencia social, aprendiendo a compartir.
Los juguetes los podemos clasificar como de perceptividad, que son los juguetes que producen sonidos y/o movimientos; de psicomotricidad, son aquellos que desarrollan la motricidad en el niño, que pueden ser los de arrastre; los que contribuyen a la habilidad manual; los que afectan a la actividad física de todo el cuerpo; de afectividad, son aquellos juguetes en los que el niño deposita emotividad, como en el caso de los peluches u ositos; dramáticos que permiten al niño canalizar sus fantasías en forma de juego simbólico utilizando la dramatización.
Pueden ser de tres tipos: los que reproducen las acciones de los adultos, como coches, teléfonos, planchas, cocinas, etc...; los que ayudan a identificar personajes, como los disfraces; por último tenemos aquellos que estimulan la fantasía a través de muñecos, como es el caso de los títeres.
Los de creatividad permiten al niño crear entes reales o imaginarios; los intelectuales permiten la posibilidad de resolver problemas, ya sea por asociaciones especiales o lógicas, como el caso de juegos como el dominó, ajedrez, etc...
Los sociales son aquellos juguetes para uso colectivo que tienen un reglamento y contribuyen a que se desarrollen conductas sociales; como ejemplo tenemos un bingo, juegos de cartas, etc...
De ejercicio, que a su vez pueden ser: sensoriales, manipulativos, psicomotrices.
Simbólicos, son los juegos de representación y de roles.
De ensamblaje, como los juegos de construcción, de montaje de mecanos, de poleas, etc...
De reglas, como los juegos de habilidad, de azar, de estrategias, etc...
Lingüísticos,juguetes que contribuyen al desarrollo del lenguaje.
Afectivos, juguetes con los que el niño puede desarrollar su afectividad de forma plena.
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